7. La decisión más importante de tu vida

¿Si te ofreciera un puño de diamantes o un vaso de agua fresca y limpia, cual elegirías? Los diamantes por supuesto, ¿Quién en su sano juicio no lo haría? Pero si estuvieras arrastrándote en un desierto con los labios partidos, la lengua hinchada y muriendo de sed, y te ofrecieran un vaso de agua fresca y clara a un puño de diamantes, despreciarías los diamantes y dirías: -dame el agua antes de que muera. Eso es lo que se conoce como “prioridades circunstanciales”; tus prioridades cambian de acuerdo a las circunstancias.
Nuestra vida es pasajera es como “una sombra” (Salmo 39:6); como “la hierba del campo” crece pero después de un tiempo no se sabe de ella (Salmo 103:15,16); es como “una neblina” que al poco  tiempo desaparece (Santiago 4:13). Sin duda es la vida es bella, nadie desearía morir, pero debemos tomar en cuenta que no seremos eternos, al menos no en este mundo ¿Cuánto puede vivir el hombre en esta tierra? ¿Ochenta, noventa años? o hasta un poco más de cien años si bien te va.
¿Cuál es tu prioridad? Muchos dicen que no hay que preocuparse del futuro, “hay que vivir la vida” disfrutar el presente! Ya vimos en los blog anteriores la condición pecaminosa en la que nos encontramos y las consecuencias mortales en la “eternidad”. La prioridad en la eternidad va a ser obtener la SALVACIÓN pero va a hacer demasiado tarde. Por eso es importante que en esta vida nos preparemos para nuestra estancia eterna. Jesús dio su vida en sacrificio para el perdón de nuestros pecados y así obtener la salvación de nuestra alma; muchos creen erroneamente que Dios decidirá hasta el último minuto el destino eterno de cada persona, lo que no saben que Dios ya proveyó un medio de salvación y es responsabilidad personal tomarlo o dejarlo.
¿Cómo obtener el perdón de Dios?
Algún tratan de obtener el perdón de Dios y la salvación a través de “buenas obras”; “sacrificios”; “$$$” sin embargo la biblia dice que no se puede lograr la salvación de esa forma, es una creencia equivocada porque si para llegar al cielo se tratara de las cosas buenas que hiciéramos por lo demás, del dinero que diéramos a los necesitados o todo el sacrificio humano para supuestamente merecer el cielo, muchos de nosotros quedaríamos fueras comparados con otros que pudieran dar más, ayudar más, etc. Solo los grandes multimillonarios que dan exorbitantes cantidades de dinero a la caridad; solamente aquellos grandes magnates podría entrar al cielo por sus obras y aquellas personas que han contribuido a la humanidad con sus descubrimientos o que han dado su vida entera a servir a los demás. Sería totalmente un Dios injusto si algunos pudieran comprar la salvación aunque sus acciones no sean justas y sus intereses y motivaciones falsas.
Afortunadamente no es así, nadie puede con su dinero; servicios; sacrificio ganarse al cielo porque CADA UNO ES PECADOR. Ahora, no quiero decir que este mal darle a los pobres, ayudar al necesitado, la viuda, al huérfano, pero el PECADO no se paga con “buenas acciones”, con “riquezas” o “sacrificios”, pero si con el UNICO y SUFICIENTE SACRIFICIO: JESUCRISTO.
“Porque Cristo mismo sufrió la muerte por nuestros pecados, una vez para siempre. Él era inocente, pero sufrió por los malos, para llevarlos a ustedes a Dios. En su fragilidad humana, murió; pero resucitó con una vida espiritual” 1 Pedro 3:18
Es por eso que el sacrificio de Jesús es suficiente para perdonar nuestros pecados y alcanzar la gloria eterna. Nada de lo que podamos hacer se podrá comparar con su entrega, amor y sacrificio de Hijo de Dios.
 “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.” Efesios 2:8-9
La SALVACIÓN es un don (regalo) de Dios para el hombre. Así como cuando tu abuelita te regala algo, sería un insulto para ella pagarle por el regalo, porque simplemente porque es eso: un regalo. Nuestras obras humanas no pueden compararse con el sacrificio perfecto de Jesús, recordemos que nuestra vida está en pecado. Si estuvieses preparando un Omelet de seis huevos y al romper el último te das cuentas que este está podrido, pero dices, no importa, lo voy a poner en el Omelet de todas formas. ¿Cómo crees que se sentirían las visitas cuando prueben el Omelet? ¿Será agradable? Claro que no. Sucede igual con nuestras “buenas acciones” aunque no está mal hacer cosas buenas, pero para obtener la SALVACIÓN es totalmente desagradable ante Dios, la biblia dice que nosotros y nuestras obras son como “trapos de inmundicia”, por más que intentemos hacer lo bueno nunca podremos lograrlo porque también estará el pecado. La SALVACIÓN NO ES POR OBRAS, no necesitas “hacer”; “dar“; “sacrificar” nada para lograrla: ES UN REGALO
¿Qué espera Dios de mí?
Aunque la SALVACIÓN es un regalo de Dios, hay requisitos para poder recibirlo y de esa manera responder al ofrecimiento de Dios.
1) Tener Fe en el Hijo de Dios
 “que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.” Romanos 10:9 
Mucha gente tiene fe, pero no en Jesús y en su sacrificio; tiene fe a una imagen; a un falso Cristo; otros dioses; otras filosofías y religiones; instituciones eclesiásticas; un religioso importante etc. Sin embargo Dios nos dice que para poder obtener el regalo de la SALVACIÓN es creyendo (FE) de todo corazón en JESUCRISTO, como el Hijo de Dios que sacrifico su vida para nuestro perdón de pecados y en el único y suficiente salvador. No es solamente una fe mental, es una FE que se confiesa públicamente y se vive.
Es increíble escuchar de personas que supuestamente creen en Jesucristo pero también creen en filosofías o ideas religiosas como el karma; la reencarnación; la inexistencia del cielo o del infierno; las tradiciones; la astrología; esoterismo; hechicería, etc. Esa no es la verdadera FE que demanda Dios
 “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos,..” 1 Timoteo 2:5-6
¿Por qué las otras religiones no pueden conducirme a Dios? ¿A caso no todas las religiones hablan del mismo Dios? Realmente NO, en la biblia encontramos que muchos pueblos adoraban a muchos “dioses” de los cuales Jehová abominaba, debemos recordar que quien está detrás de todos esos “dioses” es el “dios de este mundo” SATANAS
“…en los cuales el dios de este mundo ha cegado el entendimiento de los incrédulos, para que no vean el resplandor del evangelio de la gloria de Cristo, que es la imagen de Dios.” 2 Corintios 4:4
Satanás se ha encargado de cegar al mundo haciéndoles creer que todas las religiones conducen a Dios y que no importando sus creencias, pero si son medianamente “buenos” pueden llegar al cielo, tachando de fanáticos aquellos que siguen fielmente  a Jesucristo.
 “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 14:6
Es importante notar en la anterior cita, en palabras de Jesús mismo que se da un título exclusivo como el ÚNICO CAMINO, la ÚNICA VERDAD y el ÚNICO que puede dar VIDA eterna, con esto queda excluido cualquier otro camino que supuestamente te lleve a la salvación ¿Por qué? ¿A caso no es muy radical e intolerante? Yo te pregunto: Además de Jesús ¿Qué otra supuesta deidad o líder iluminado de cualquier religión, se ha humillado así mismo para dar su vida en sacrificio por los pecados de la humanidad o se declaro ser Dios? ¿Buda? ¿Mahoma? ¿Confucio? Etc, Algunos pudieron haber sido grandes pensadores; líderes; humanitaritas, pero murieron y yacen en su tumba. En cambio Jesús es diferente, su tumba está vacía y sigue vivo transformando vidas aun después de 2000 años de cuando realizo su misión en esta tierra. La salvación es un regalo de Dios ¿Cómo debemos responder? Con fe en el Hijo de Dios.
2) Arrepentimiento genuino
Muchos están conscientes de sus faltas y algunos podrían asegurar que ya han pedido perdón a sus semejantes, pero olvidan que antes que sus semejantes han ofendido a Dios quebrantando sus mandamientos; si no se pide perdón a aquel que está sentado en el trono celestial, por más que nos podamos arrepentir 1000 veces, si no va dirigido a Él, no cuenta para nuestra salvación. No basta con solo creer, necesitamos pedir perdón a Dios:
 “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad” 1 Juan 1:9
 “Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.“ Isaías 1:18 
La fe en Jesús debe ir acompañada de un genuino ARREPENTIMIENTO, reconociendo nuestros pecados. No es creer superficialmente, se necesita una fe con CONVICCIÓN DE PECADO, un dolor profundo en el alma al ver que nuestras acciones han ofendido a Dios y que nuestro destino eterno es el infierno con justa razón, pero que Dios en su misericordia estuvo dispuesto a dar su vida por cada uno de nosotros, de tal modo que podamos clamar: ¡Dios mío he pecado, no lo merezco pero perdóname! eso es el ARREPENTIMIENTO GENUINO. Y Dios está dispuesto a perdonarte pero debes humillarte delante de Él y el extenderá su brazo de misericordia.
“al corazón contrito y humillado, oh Dios, no despreciarás.” Salmo 51:17
3) Un compromiso de seguir a Jesucristo
Muchos creen en Jesús, su vida y obra, pero igual puede creer un borrachito que esta tirado en la calle en estos momentos; un asesino; narcotraficante; un clérigo; político, intelectual, etc, y hasta es posible que se hayan arrepentido más de una vez, pero ¿Cuál es la diferencia? No habría diferencia alguna. La verdadera FE en Jesús consiste en que todos los que vienen a Jesús con ARREPENTIMIENTO no vuelven a ser los mismos. El verdadero ARREPENTIMIENTO no solo consiste en reconocer los pecados sino también un COMPROMISO a no volver a pecar y obedecer a Dios. De nada sirve arrepentirse por un momento y al día siguiente volver seguir con el pecado, es como si nunca se hubiera arrepentido y el sacrificio por los pecados se pisotea.
 “El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.” Proverbios 28:13 
Cuando uno se Arrepiente de corazón hace un COMPROMISO con Dios de dejar atrás el pecado; los vicios; placeres mundanales y seguirlo a Él, OBEDECER sus mandamientos, no para alcanzar la Salvación porque eso ya lo da Jesús gratuitamente, sino como respuesta a nuestra GRATITUD y AMOR hacia Él. Algunos no desean COMPROMISO alguno con Dios porque consideran una carga cumplir las demandas, lo que no saben es que cuando haz conocido que tu vida merecía la justa ira de Dios y estaba al borde de la muerte, pero has sido rescatado por la sangre de Jesucristo en la cruz, ¿Cómo no estar ETERNAMENTE AGRADECIDO? No hay nada en el mundo con que pagar el sacrificio de Jesús, ni con todo el oro del mundo podríamos pagar el precio de nuestros pecados o retribuirle algo por su sacrificio. La salvación costó la sangre del Hijo de Dios, pero Él increíblemente nos la da gratuitamente, ¡debemos responder con gratitud y amor!
“Por eso, deben ustedes renunciar a su antigua manera de vivir y despojarse de lo que antes eran, ya que todo eso se ha corrompido, a causa de los deseos engañosos.” Efesios 4:22 
y se han revestido de la nueva naturaleza: la del nuevo hombre, que se va renovando a imagen de Dios, su Creador, para llegar a conocerlo plenamente.” Colosenses 3:10 
Cuando venimos a Dios humildemente con ARREPENTIMIENTO y FE, Él nos promete transformar nuestra vida, limpiándonos del pecado, dejando atrás todas las cosas que hicimos no importando cuan malas hayan sido, no hay pecado que la sangre del Santo Jesús no pueda limpiar por completo. Muchos intentan cambiar de vida, hábitos, pensamientos, actitudes, pero es sola apariencia porque por dentro siguen siendo igual de pecadores. Solo Dios puede cambiar nuestra vida entera. Su sangre nos limpia nos hace personas justas y santas, Él nos da un nuevo corazón y nuevos pensamientos para vivir una vida agradable a Él, solo de esa manera podemos transformar nuestra vida, no por nosotros mismos, sino porque Él nos hace justos y santos por su sangre.
“…Quitaré de ustedes ese corazón duro como la piedra y les pondré un corazón dócil. Pondré en ustedes mi espíritu, y haré que cumplan mis leyes y decretos; vivirán en el país que di a sus padres, y serán mi pueblo y yo seré su Dios. “Ezequiel 36:25-28 
La gran decisión
Hemos llegado a este punto culminante en que se tiene que tomar inevitablemente un importante DECISIÓN: Aceptar con FE y ARREPENTIMIENTO a Jesucristo, reconociendo su sacrificio para el perdón de nuestros pecados y estas dispuesto a un COMPROMISO de seguirlo fielmente o simplemente seguir la vida como se plazca, ignorar este mensaje y buscar otras supuestas alternativas.
 “El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.” Juan 3:18
Ya hemos visto que Jesús es la única solución para nuestro pecado, no hay nadie más que haga lo que Él hizo por nosotros. El no aceptar o quedar en silencio ante este mensaje de salvación es seguir en pecado y en rebeldía en contra de Dios. Pero la decisión final tú la debes tomar, Dios no obliga a nadie a creer en Él, nos ha dado la capacidad de razonar y tomar nuestras propias decisiones pero también de hacernos responsable por ellas. (Ver anteriores blogs)
Si al leer a esta aquí estas consiente de tu pecado, te causa tristeza saber que le has fallado a Dios y que enfrentaras el justo juicio de Dios, pero deseas ser perdonado, reconoces a Jesucristo como el Hijo de Dios y estás dispuesto a dejar atrás el pecado puedes realizar una oración con tus palabras:
1. Reconoce tu pecado ante Dios
2. Que estas arrepentido y necesitas su perdón
3. Reconoce el sacrificio de Jesús en la cruz para el perdón de pecados
4. Haz compromiso de dejar el pecado
4. Que estás dispuesto a seguirle por amor y obedecerle, hacerlo a Él el Señor de tu vida
Con estas sencillas palabras en oración ACEPTAS a JESUCRISTO COMO TU SALVADOR. Si quizás piensas que no puedes, no te preocupes… Dios te guiara hacia ÉL.
 “Cercano está Jehová a todos los que le invocan, A todos los que le invocan de veras.” Sal 145:18
Si no has tomado la decisión hasta este punto, gracias por tomarte el tiempo de leer hasta aquí, te invito a que reconsideres todo lo que has leído antes de rechazarlo totalmente.

Si has hecho la oración de corazón, has obtenido el perdón de tus pecados y la salvación de tu alma a través de Jesucristo, una nueva vida ha surgido (nuevo corazón, nuevos pensamiento) por medio del Espíritu Santo, has entrado a formar parte de ¡La familia de Dios! eres un Hijo de Dios,  y puedes tener la seguridad de una esperanza eterna junto con el Señor,Jesús lo prometió:
“En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros” Juan 14:2
La vida cristiana no es pasiva, no es solamente creer o hacer una oración, es una fe que se vive. Dios te ha hecho santo desde ahora y te da la capacidad y la ayuda del Espíritu Santo para permanecer puro y así vivir una vida agradable a Él, apartado del pecado para amarle y servirle solo a Él.


Para poder mantener el rumbo y no volver atrás debemos aprender a como caminar con el Señor, para eso Dios nos ha provisto de las herramientas necesarias: 1) Lee la biblia todos los días, ya que es el alimento para el alma y la fuerza que sostendrá tu fe, son las palabras que Dios te ha dejado escrito para ti. 2) Ora todos los días, la oración es la comunicación personal con Dios, Él es tu amigo y desea estar al tanto de tus dificultades y necesidades tanto espirituales como físicas para responderte. 3) Congrégate en una iglesia. Dios ha provisto de una familia espiritual, personas que al igual que tu han creído en Jesús y pueden ayudarte con sus consejos, enseñanzas bíblicas y oración para que puedas desarrollarte en tu nueva vida con Jesús. (Busca congregarte en donde se predique la verdad, hay muchas supuestas iglesias en donde Jesús ni se menciona, por lo tanto no es su familia). 4)Comparte de lo que has recibido. Estas buenas noticias lo tiene que saber tus amigos, familias, conocidos, no dudes en compartirlo.
Si tomaste la decisión de seguir a Jesucristo, ¡Te felicito! Haz hecho la mejor decisión de tu vida. Y en el cielo hay gran gozo porque un alma más ha sido salvada. Puedes contactarme contacto.raulmtx @gmail.com será un gusto saludarte.

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