4. ¿Inocente o Culpable?

Imagina que estas ante un juez en un caso criminal, y el juez tiene todas las evidencias en tu contra. Él sabe que eres un asesino, y que has mentido para evadir la justicia. Si él es un buen juez no puede dejarle ir. Él debe asegurarse de que si eres culpable seas condenado.
Dios es Amor, no me condenará!! Estas es una de los más populares argumentos cuando se le habla a la gente acerca de sus pecados, del juicio divino del futuro destino no muy agradable. Muchos alegan que si DIOS es todo AMOR, como es posible que los pueda sentenciar a un castigo eterno. Bueno, a mis queridos lectores que piensan de igual manera les puedo decir que no se engañen. Es una realidad que DIOS ES AMOR y que desea lo mejor para el hombre, pero debemos recordar que no solamente es amor también parte de su naturaleza es la JUSTICIA y la SANTIDAD.
“Dios es un juez justo  que condena la maldad  en todo tiempo“ Salmos 7:11 DHH
“…porque la Escritura dice: "A mí me corresponde hacer justicia; yo pagaré, dice el Señor." Romanos12:9 DHH
No eres tú un Dios  que se complace en lo malo;  los malvados no pueden vivir a tu lado” Salmos 5:4
“Sé que soy culpable pero creo que iré al cielo porque Dios me perdonarán en el último momento”, normalmente el que piensa así es porque cree que Dios es “bueno” y “amoroso” y que Él pasará por alto el pecado en su caso, pero no es así, veamos que dice la escritura:
“Pero tú, como eres terco y no has querido volverte a Dios, estás amontonando castigo sobre ti mismo para el día del castigo, cuando Dios se manifestará para dictar su justa sentencia y pagar a cada uno conforme a lo que haya hecho.” Romanos 2:5-6 DHH
Imagina la historia del inicio: El homicida llega ante la presencia del juez y antes de escuchar la sentencia final dice algo como: “Yo sé que he cometido un delito, pero he escuchado que eres un bueno juez, así que ¿porque no me dejas ir?”. Piensa por un momento: ¿Acaso porque el juez es bueno dejará ir al homicida? Claro que no!!!, es más por lo mismo que él es bueno le dará su merecido. Dios no es cualquier juez, muchas veces lamentablemente escuchamos por la TV o nos llegamos a enterar por los medios impresos acerca de cómo el juez falla en favor de los malvados y perversos en lugar del inocente y en vez de ser un juicio justo es todo lo contrario, quizás porque hubo soborno de por medio, pero no así ante el Juez justo y santo y perfecto que odia la maldad.
En el anterior blog: ¿Eresuna buena persona como para ir al cielo? Comprobamos que nadie puede ser “perfectamente bueno” y no es una conclusión personal, veamos que dicen las sagradas escrituras acerca de esto:
Para comenzar la biblia dice que TODOS somos PECADORES: “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios…” Romanos 3:23. No importa la edad que tengas, si eres hombre o mujer, cuan bueno trates de ser, delante de Dios TODOS y CADA UNO somos pecadores y desde que nacemos ya venimos con la naturaleza pecaminosa. Recuerdas el estudio de que los bebes mienten, esta es la explicación: “Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte,  así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.“ Romanos 5:12 El pecado entro por un hombre Adán (se incluye el pecado de Eva también pero de una forma general se habla del “Hombre” como el todo de la humanidad y aludiendo a Adán como el primer ser humano creado) y así todos sus descendientes hasta el día de hoy llevando la mancha del pecado y siguiendo una vida viciada de pecado desde que nace hasta que muere.
La consecuencia del PECADO es la MUERTE: “Porque la paga del pecado es muerte…” Romanos 6:23. Para todo hay consecuencias, Adán y Eva desobedecieron a Dios (PECARON) y la consecuencia fue ser echados del huerto de Edén, el hombre ganaría el pan diario con el sudor de su frente y con gran esfuerzo y la mujer tendría con dolor sus hijos, además que como consecuencia de su pecado quedaría separados de la presencia de Dios por lo tanto condenados a una MUERTE ETERNA (INFIERNO). El morir terrenalmente solo es el paso para una muerte eterna en el castigo y sufrimiento eterno, consecuencia de nuestros propios pecados. Por lo tanto si alguien muere inevitablemente se va a una eternidad de sufrimiento porque es el pago por hacer el pecado.
Alguien podría decir el siguiente argumento: “Bueno si he fallado y he pecado poquito”. Para Dios el pecado es pecado, no hay categorías, tamaños, colores, etc el hombre tiende a comparar, pero ya vimos que no así Dios. Quizás alguien diga: “He quebrantado solamente 1 mandamiento de los 10, se podría decir que soy casi perfecto” En Santiago 2:10 dice que cualquiera que guardare toda la ley, pero ofendiere un solo punto, se hace CULPABLE de TODOS. El efecto eslabón roto: Si cayeras de un edificio hacia una muerte segura y solo una cadena te sostuviera de caer al vacío, pero si un solo eslabón se rompiera no importará que todos los demás eslabones que conforman la cadena estuvieran completos de todos modos caerías, igualmente sucede con la ley de Dios.
“Yo creo en Dios pero no creo que sea para tanto” La biblia dice: “Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.“ 1 Juan 1:8 
“Estas juzgando sin conocerme, no creo que sea pecador” Lo que he expuesto hasta ahora no es mi opinión personal, sino lo que dice Dios en su palabra.  Si decimos que no hemos pecado, le hacemos a él mentiroso, y su palabra no está en nosotros.” 1 Juan 1:10
Llegamos a la conclusión de que TODA la humanidad está en pecado, por tanto TODOS antes que fallarle a otras personas, le hemos fallado primeramente a Dios. Es posible que no creas lo que dice “la Biblia”, solo habrá una forma definitiva de averiguarlo y será el día que rindamos cuentas de nuestras vidas ante el gran Juez: Dios. Analiza lo que hemos tratado en este blog y en el anterior y te darás cuenta que hay demasiada evidencia que apunta nuestro corazón pecaminoso, la pregunta siguiente es: ¿Por tu culpabilidad merecerías el Cielo o el infierno?
*Si alguien al leer esto le ha causado una tristeza y dolor inexplicable, no se desanime, es la prueba de que la palabra de Dios y el Espíritu de Dios está haciendo su labor, estamos cada vez más cerca de poder comprender el mensaje de esperanza, aunque para ello tendremos que pasar por estas etapas difíciles, que ayudarán a comprender lo que viene.  (Continua 4 de 7) No te detengas, continua leyendo

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